Turistas

  

Todo llega, la invasión de gaviotas paseando sus huellas en la arena y dejando sus graznidos por la costa.

 ¡Yupi! eso significa que el verano esta cerca, interrumpe un caminante en su diálogo con el amigo, al ver un grupo de cuerpecitos blancos en la arena y volando. 

Ya te dije Anselmo, las gaviotas tienen hambre y sobrevuelan mar y playas en busca de crustáceos, estrellitas de mar, pececillos nadando, y restos de calamar. 

Es mas fácil la comida preparada, Lucas, ¿pensabas que las gaviotas son idiotas? son listas pero se hacen las tontas. Aprenden rápido de los malos hábitos humanos.  Los animales nos pisan los talones.

Creemos ir por delante, pero el hombre comete errores y ellos aprenden. Ir por delante, significa en muchos casos darse la bofetada antes.

En zonas de restaurantes y terrazas, cerca se encuentran contenedores de basura con restos de patatas fritas con ketchup, hamburguesas de ternera, huesecillos de muslo de pollo y algún cucurucho con restos de helado. Allí van y al parecer les gusta.

Algún verano de estos, hablaran expertos sin médicos ni veterinarios poniendo el grito en el cielo. ...  Dirán que las gaviotas sueltan sus heces desde el cielo ensuciando mares y playas,  abriendo con sus siluetas agujeros en el cielo. Pero del movimiento brutal de los macro-conciertos y sus residuos, de eso nada, es más dicen que atrae turismo. 

¿Turismo?, ¡Qué barbaridad! Cualquier día te expropiaran el cerebro, para que no pienses.

 Al parecer en algunos lo han conseguido.