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Demos las gracias y no digamos nada. Vuelve a tu casa y enciende la luz, para que todos puedan verte en la noche como al gusano gusiluz. Cuando te levantes mañana, tu traje a primera hora preparas. Que por la noche festejamos carnaval por todo lo alto, alguno de los dos de animal. Tu te disfrazas de pitufo y yo de gamo. Por ser carnaval a reírse y disfrutar y que nadie venga vestido de esquimal con chupete y pañal , que toda comparsa que se precie lleva en la maleta un orinal.
Di que sí, que las silabas son libres y se las puede llevar el viento. Qué todo es espera y tiempo y no hay que creer cualquier versión, que muchas son cuentos. Me temo que hay cosas que no se ven, las que van por dentro, no la superficialidad, no hay que quedarse solo con eso. Lo que cuenta es la intención, y para ello observar, callar y gastar la intuición. Allá cada cual con su carnaval y particular forma de mirar. Cada día sigo más convencida de, a quien le gusta aparentar y subirse a carros enmascarados. También sé que hay personas de verdad y otras de cartón, otras son enfermedad. Allá cada cual con su yo.
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