domingo, 6 de febrero de 2011

La firma











Desde luego, es ilegible. Nadie puede decir que ahí se pueda leer de nombre, Luís Aguirre. Tal vez, sea su costumbre, el hacer que no coincida ninguna línea o curva, con letra conocida, vocal o consonante. Yo diría, en humilde opinión, y sin tener idea de grafología, que se trata de una “firma candado” Únicamente se puede comprobar rasgo a rasgo con un sistema de tecnología muy avanzado. Quiero decir, que nadie por muy experto que sea, pueda reproducirla. Sería el primer caso.
Puede quedar algo claro de todo esto…. estos trazos y el tono de la tinta me dice con toda probabilidad el modelo de estilográfica con que trazó la firma.





2 comentarios:

  1. Hay personas que se esconden tras sus firmas ,yo soy una de ellas. ¡Pero esconder la estilográfica es más difícil ,por lo que veo!
    Un abrazo :)

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  2. Ari,también me escondo tras un garabato de tinta. Y tras la pantalla. Y lo peor de todo, antes y aun ahora, tras las puertas ... :)

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